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Miradas hacia una agenda urbana con igualdad de género


[Montevideo, Uruguay] Mayo culminó con una importante jornada para la construcción de ciudades inclusivas. Se trata de un espacio convocado por la intendencia de Montevideo que contó con la presencia de expert@s, academic@s, miembr@s de organizaciones de la sociedad civil y del gobierno en sus tres niveles, municipal, departamental y nacional. El evento, con miras a Hábitat III, se planteó como un espacio de intercambio y reflexión en pos de sumar e integrar diversas miradas con perspectiva de género en relación a la ciudad. Con exposiciones de expertas de Brasil, Argentina y Chile, la construcción de ciudades inclusivas se manifestó como un asunto de suma importancia en la era actual.

En este marco, la Arq. Ana Falú aseguró que “se está trabajando mucho en la agenda urbana para ver de qué manera incorporar dimensión de género, un concepto que debe impregnar la agenda urbana y de acción de los gobiernos. ¿De qué manera? Conociendo, dónde están las mujeres, quiénes son, qué ingresos tienen, cuántos hijos y en qué territorio viven". Para ello, sostuvo, hay que apuntar a una política urbana que atienda los promedios desiguales de nuestra Región: "cuando digo las mujeres estoy tomando a esa población omitida, invisibilizada en las políticas, porque somos el 52% de América Latina”.

También se refirió en su ponencia a la División Sexual del Trabajo: "La agenda urbana tendría que tomar en consideración la proximidad de los servicios porque son las mujeres, por la división sexual del trabajo, las que siguen haciéndose cargo de todo lo que es relativo a las tareas productivas, a las tareas que están vinculadas a la infancia, a los adultos mayores, al abastecimiento, a las gestiones municipales, a esa infinidad de tareas que significa que las mujeres, según todos los estudios, hacemos viajes múltiples y más cortos a diferencias de los hombres que se mueven más bien punto a punto. A su vez, para facilitar esa calidad de vida, en estas ciudades extensas de nuestra América Latina, sobre todo desiguales, necesitamos tener servicios de proximidad, por ejemplo: guarderías infantiles con horarios amplios, para que las mujeres puedan realmente desarrollar sus autonomías económicas, desarrollar sus capacidades políticas, culturales, tengan tiempo. Ese, que es el bien más escaso, que más falta en la vida de las mujeres".



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